Manteca de karité – cabello bonito

La manteca de Karité se extrae de un árbol llamado Vitellaria. El lugar donde se cultivan estas plantas se conoce como el  ‘cinturón de Karité’. Se extiende a través de 7 países africanos, entre ellos Ghana, Togo y Nigeria, por nombrar sólo algunos. Los europeos encontraron el árbol de Karité en el siglo XVIII. Cien años después, el árbol fue calsificado como una planta botánica.

Y todos estos eventos fueron posibles debido a Mungo Park.

El aceite extraído del árbol de Karité tiene muchos usos. Se puede utilizar para la cocina, la construcción, así como para fines médicos. En la actualidad, la manteca de Karité también se utiliza en la industria cosmética. Es un ingrediente muy común en jabones, cremas y mascarillas para el cabello. La manteca de karité fresca se caracteriza por el sabor a nuez (cuando se refina es completamente insípida). Su color varía según la consistencia y el nivel de procesamiento. La manteca de Karité debe ser almacenada en un lugar seco y oscuro. Cabe destacar que este producto natural no desaparece y sus características curativas se mantienen hasta un año.

La manteca de Karité contiene varios ingredientes esenciales para la salud y la belleza. ¿Qué podemos conseguir al usar este producto? Piel lisa, sin arrugas y humectación profunda. La manteca de Karité también tiene propiedades que ayudan a aliviar las irritaciones, ya que facilita los procesos de curación de heridas y cicatrices pequeñas.

¿Cómoo afecta la manteca de Karité al cabello? En primer lugar, fortalece los folículos y alivia las irritaciones del cuero cabelludo. También suaviza, humecta y hace que las hebras se vuelvan máselásticas. Además, esta sustancia natural es capaz de restaurar el brillo y humectar las hebras secas, dañadas y rotas. Por si todo esto fuera poco, la manteca de Karité se puede utilizar para el cuidado de cabello en casa. Aplique una pequeña cantidad del producto previamente calentado en las palmas de las manos y luego distribúyalo en el cabello ligeramente húmedo. Después de 30 minutos, proceda a lavar el cabello para que los filamentos no luzcan grasientos.